No es ninguna sorpresa que las manzanas son un excelente aliado para la salud. No se ganaron de gratis una buena reputación con el popular dicho "una manzana al día mantiene alejado al médico", pero en las últimas décadas, gracias a las investigaciones científicas, existe una serie de razones comprobadas que reconocen los beneficios de esta deliciosa fruta. Descubre en este artículo 12 excelentes beneficios que tiene la dieta de la manzana para la salud.

La fibra soluble que contienen las manzanas se une a las grasas en el intestino al consumirlas, lo que se traduce en una notable reducción en los niveles de colesterol, ayudando al cuerpo a utilizarlo en lugar de almacenarlo.

Una manzana mediana puede contener cerca 4 y 5 gramos de fibra, específicamente posee pectina, un tipo de fibra soluble relacionada con niveles más bajos del llamado colesterol "malo" o LDL,  Todas las frutas contienen pectina en cantidades variables, pero las manzanas y naranjas contienen mucha más pectina. Los niveles de pectina en las manzanas alcanzan el máximo cuando están a punto de madurar. 

La manzana es un poderoso desintoxicante del hígado debido a su contenido de cisteína, arginina y ácido málico que actúan como diuréticos,  mediante la reducción de la secreción de insulina. Continuamente estamos consumiendo toxinas, ya sea a través de las comidas y bebidas, y es el hígado el responsable de eliminar estas sustancias dañinas de nuestro organismo.  

También favorece la eliminación de líquidos corporales, resulta adecuada para eliminar toxinas corporales. Por ello, se recomienda en casos de obesidad, reuma y enfermedades relacionadas con los riñones.

Lo ideal es comer las manzanas con la piel, porque al morderlas así protegen nuestros dientes y contribuye a mantener limpias las encías, eliminando las pequeñas partículas que se puedan depositar entre las piezas dentales. Por supuesto, nunca olvides lavarlas muy bien con agua para eliminar los residuos que puedan tener.

Lo dicho anteriormente no significa que una manzana reemplazará el cepillado de dientes, pero ciertamente masticar bocados de manzanas estimula la producción de saliva en la boca, lo que reduce la caries dental debido a la reducción de los niveles de bacterias.

Si no puedes ir al baño porque sufres de estreñimiento, o por lo contrario no puedes parar de ir porque tienes diarrea, la fibra que se encuentra en las manzanas te ayudará rápidamente. La fibra soluble de estas frutas es poderosa, se encarga de desechar el agua del colon para mantener su correcto funcionamiento, o lo contrario, absorber el exceso de líquido y regular el paso de las heces a través de los intestinos.

Diversos estudios han demostrado que la fibra de las manzanas reduce los trastornos intestinales, incluyendo diverticulitis, hemorroides y posiblemente algunos tipos de cáncer.

Una reciente investigación de la Universidad de Massachusetts reveló que el consumo del jugo de manzana puede incrementar la producción en el cerebro de acetilcolina, esencial para el funcionamiento de los neurotransmisores dando como resultado un mejoramiento en la memoria. Además activa las funciones cerebrales gracias al contenido de fósforo. Los neurotransmisores como acetilcolina son productos químicos provenientes de las células del nervio que transmiten mensajes a otras células del nervio. Esta comunicación entre las células es vital para la buena salud de todo el cuerpo, previene la enfermedad de Alzheimer y retrasa el envejecimiento de las células del cerebro.

Las personas que comen frutas y alimentos ricos en fibra tienen menos probabilidad de padecer Parkinson, una enfermedad caracterizada por una ruptura de las células nerviosas productoras de dopamina en el cerebro. 

Las manzanas rojas contienen un beneficioso antioxidante llamado quercetina, que permite al oxígeno llegar a los pulmones fácilmente. Estudios recientes han comprobado que la quercetina puede ayudar a impulsar y fortalecer el sistema inmunológico. Además, las manzanas son ricas en varias vitaminas, incluyendo la vitamina C.

Las manzanas son naturalmente dulces, de manera que  ayudan a satisfacer los antojos. Son bajas en calorías y totalmente libres de grasa, así que puede sentirse libre de comerlas.

Cinco o más manzanas a la semana mejoran la función pulmonar, gracias a la quercetina que se encuentra en la piel de las manzanas, también presente en las cebollas y los tomates. Los beneficios impresionantes de manzanas se extienden aún más: las mujeres embarazadas que consumen esta fruta son menos propensas a tener niños con asma. 

Las personas que consumen al menos una manzana al día son 28 % menos propensos a desarrollar diabetes tipo 2 que quienes no la comen. Las manzanas están cargadas de fibra soluble, clave para regular los niveles de azúcar en la sangre. Además es una fruta tolerada por diabéticos, gracias a su escaso contenido en sacarosa.

Aunque los resultados de estudios anteriores han estado divididos sobre el tema, las investigaciones más recientes sugieren que las personas que tienen una dieta rica en frutas que contienen antioxidantes, como las manzanas, tienen entre 10 a 15 % menos probabilidades de desarrollar cataratas.

Por sus propiedades astringentes, la manzana se ha utilizado desde tiempos remotos para la elaboración de mascarillas faciales, con el fin de eliminar impurezas y reafirmar la piel.

Las manzanas son un excelente tónico nervioso y muscular gracias a sus azúcares, abundante fósforo y las vitaminas B y C. La presencia de hierro completa esta acción tonificante.