9 Razones Por Las Que La Obesidad No Es Una Elección

La obesidad es un problema mundial que está afectando a millones de personas alrededor del mundo, y que cada día se vuelve más y más grave. La gente culpa a las pésimas elecciones dietéticas y a la inactividad como los principales responsables de la obesidad, pero no es es tan sencillo como parece.

Otros factores pueden tener efectos trascendentales en el peso corporal y en la obesidad, incluso si están fuera del control de la persona. Aquí te presentamos 9 razones convincentes del porqué la obesidad no es solo una elección:

1. Genética y factores prenatales

Ahora se sabe bien que pueden determinarse muchas cosas mientras el feto aún está en el útero.

La dieta de la madre y las elecciones en su estilo de vida importan mucho, y pueden influir en los comportamientos futuros del bebé, y también en su composición corporal.

Algunos estudios demuestran que las mujeres que ganaron un peso excesivo durante el embarazo son más propensas a tener niños obesos a los 3 años.

Igualmente, los niños que tienen padres y abuelos obesos son mucho más propensos a ser obesos que los niños con padres y abuelos de peso normal.

Alrededor del 40% de los niños con sobrepeso seguirán siéndolo durante su adolescencia, y del 75 al 80% de los adolescentes obesos se convertirán en adultos obesos.

2. Nacimiento, infancia y hábitos de la niñez

Aunque no se conocen las razones, los niños que nacen a través de cesárea son más propensos a padecer obesidad durante su vida. Esto también aplica para los bebés alimentados con fórmula, quienes tienden a ser más pesados que los alimentados con leche materna. Esto puede deberse a que los dos grupos desarrollan bacterias intestinales diferentes, lo cual puede afectar la forma en que almacenan grasa.

Además, formar hábitos saludables en la dieta y hacer ejercicio durante la niñez, pueden ser la mejor forma de prevenir la obesidad y aquellas enfermedades relacionadas con tu estilo de vida. Si los niños pequeños desarrollan el gusto por los alimentos saludables en lugar de los alimentos procesados, les ayudará a mantener un peso normal a lo largo de su vida.

3. Medicamentos o condiciones médicas

Muchas condiciones de salud y enfermedades requieren medicación para su tratamiento. Desafortunadamente, el aumento de peso es un efecto secundario común de muchos medicamentos. Esto incluye los de la diabetes, antidepresivos y antipsicóticos.

Estos fármacos pueden aumentar el apetito, reducir el metabolismo o incluso alterar la habilidad del cuerpo para quemar grasa , provocando que la almacene en lugar de quemarla. Además, enfermedades como el hipotiroidismo, pueden predisponer a las personas a aumentar de peso.

4. Hormonas del hambre

El hambre y la alimentación incontrolable no son solo causadas por la ansiedad o la falta de voluntad. El hambre es controlada por hormonas muy poderosas y químicos cerebrales, que afectan áreas del cerebro que son responsables de los antojos y las recompensas.

Muchas personas obesas tienen una función deteriorada de estas hormonas, lo cual altera su comportamiento alimenticio y causa un fuerte impulso psicológico para comer más y más.

El cerebro tiene un centro de recompensas, el cual se ilumina y comienza a secretar dopamina y otros químicos que nos hacen sentir bien cuando comemos. Esta es la razón por la cual la mayoría de nosotros disfrutamos comer. Este sistema también se asegura de que comemos suficientes alimentos para obtener toda la energía y nutrientes que necesitamos.

La comida chatarra libera una mayor cantidad de estos químicos que nos hacen sentir bien, en comparación con los alimentos no procesados. Esto ofrece una “recompensa” mucho más poderosa en el cerebro. De este modo, tu cerebro busca una mayor recompensa causando antojos poderosos hacia esta comida chatarra.

5. Resistencia a la leptina

La leptina es una hormona muy importante que ayuda a regular el apetito y metabolismo. Es producida por las células grasas, que envían una señal a la parte de nuestro cerebro que nos indica que dejemos de comer. La leptina regula el número de calorías que comemos y gastamos, así como la cantidad de grasa que puede almacenar nuestro cuerpo.

Las personas con obesidad producen cantidades muy altas de leptina, lo que provoca que tiendan a poseer una condición llamada resistencia a la leptina. De este modo, aunque nuestros cuerpos estén produciendo mucha leptina, el cerebro no la ve o no la reconoce. Cuando el cerebro no recibe la señal de la leptina, piensa equivocadamente que se está muriendo de hambre, incluso si ya tiene demasiada grasa almacenada. Y de esta forma, es como las personas con resistencia a la leptina provoca que tengas hambre todo el tiempo y necesites llenar de más grasa tu cuerpo, aun contra tu propia voluntad.

6. Mala educación alimenticia

En nuestra sociedad, existen infinitos anuncios publicitarios, noticias en cuanto a la salud, nutricionales y de alimentos no saludables. Sin embargo, y a pesar de la importancia de la nutrición, generalmente no se les enseña a los niños ni a los adultos cómo comer apropiadamente.

Se ha demostrado que enseñar a los niños la importancia de llevar una dieta saludable y una nutrición apropiada, los ayudará a tomar mejores decisiones más adelante en su vida.

7. Comida chatarra adictiva

Algunos alimentos pueden llegar a ser muy adictivos. La adicción a los alimentos funciona de la misma forma que un drogadicto es adicto a las drogas, y lo peor del caso es que esto es más común de lo que piensas.

De hecho, hasta un 20% de las personas pueden sufrir de adicción a la comida, y este número aumenta hasta un 25% en las personas obesas y con sobrepeso. Cuando te vuelves adicto a algo, pierdes totalmente la libertad de elección y las reacciones químicas en tu cerebro comienzan a tomar decisiones por ti.

8. El efecto de las bacterias intestinales

Tu sistema digestivo es huésped de un sinnúmero de bacterias, las cuales son conocidas como microbiota intestinal. Muchos estudios recientes muestran que estas bacterias son increíblemente importantes para la salud.

Curiosamente, las personas con obesidad tienden a poseer bacterias intestinales diferentes que las personas con un peso normal. Sus bacterias pueden ser más eficientes al tomar la energía de los alimentos, aumentando el valor calórico total de lo que consuman.

9. El ambiente

En la actualidad, muchas zonas están limitadas a comprar alimentos saludables, sobre todo dentro de ciudades o grandes urbes. Existen zonas de pobreza y de poco acceso a tiendas comestibles o proveedores de productos orgánicos y saludables, en donde la gente que vive allí no lleva una vida saludable.

Debido a que no pueden trasladarse para comprar comida sana, se ven en la obligación de comer alimentos poco benéficos y de costo bajo, que traerá consecuencias con el tiempo.

Otros factores ambientales también pueden jugar un rol en la obesidad, incluyendo la luz artificial de los bombillos, computadoras, teléfonos y televisores.

La relación entre estar frente a la computadora y la obesidad, ha sido bien establecida como causa grave de sobrepeso por falta de ejercicio.