Durante años, nos hemos esforzado incansablemente en gimnasios, hemos trabajado con pesas, en rutinas de fuerza, hemos hecho rutinas de resistencia, hemos buscado la potencia, la fuerza, la definición, el volumen, hemos usado los más modernos medios de alta tecnología, dispositivos propioceptivos alucinantes, plataformas vibratorias y otros muchos artefactos ingeniosos para mejorar el aspecto y el tono general de nuestro cuerpo.

Y sin embargo, existe un ejercicio, que no requiere de estos medios sofisticados ni de un lugar específico, ni de equipamientos súper costosos, que nos permitirá transformar la fuerza, la apariencia y el tono de nuestro cuerpo de una manera evidente y asombrosa.

Es por esta razón por la que muchos entrenadores personales están incluyendo este movimiento entre sus preferidos en las rutinas. 

Estamos hablando de la estocada, que, aunque alguien pudiera reprobar como prehistórico, innegablemente proporciona unos resultados increíbles, como adelgazar los muslos, fortalecer los abdominales profundos (núcleo), reducir de forma gradual la cintura e incluso, reafirmar sus glúteos.

1. Sitúe sus pies separados la anchura de sus hombros y permanezca completamente recto.

2. Con la columna perfectamente recta, y los abdominales contraídos, adelante con un gran paso la pierna izquierda, doblando la rodilla lo más posible hasta 90º. Su pie derecho debe quedar prácticamente sin peso, desplazando éste todo lo posible en el talón del pie izquierdo.

3. A continuación, tire de su talón izquierdo, conectado mentalmente con sus glúteos, fuera del piso, retornándolo hacia la posición vertical.

4. Ahora haga el mismo movimiento, pero con la pierna derecha.

5. Haga una serie de 15 estocadas con cada pierna.

• Producen un mejoramiento general de la postura: cuando mantiene la columna recta al realizar las estocadas, hace trabajar los extensores de la espalda y los estabilizadores abdominales, el núcleo.

• Conseguirán un trasero firme y tonificado

• Ayuda activamente a fortalecer los flexores superiores de las piernas, ya que si realiza una estocada correcta, estira estos músculos, situados en la parte trasera de las piernas, que normalmente están bastante atrofiados por las horas de permanecer sentados frente a su escritorio o el volante.

• Corrigen la asimetría de su cuerpo: todos tenemos un lado dominante, y al realizar las estocadas, podemos apreciar con qué lado nos cuesta más trabajo. Si hacemos más con el lado más débil, lograremos incrementar la simetría de nuestro cuerpo.

• Además, es un ejercicio gratuito que no necesita equipo alguno para llevarlo a cabo, y se puede hacer en cualquier sitio.

Así que como ve, no hay excusa para no ponerse ya a hacer unas cuantas estocadas todos los días. Verá rápidamente los beneficios.