Si en las primeras horas del día estás muy apurada para
sentarte a comer, o no sientes hambre apenas te levantas, posiblemente sigas la
costumbre de no desayunar.
Sin embargo, tomar el desayuno es la clave para
perder peso, porque previene los ataques de hambre a lo largo del día, te ayuda
a hacer mejores elecciones alimenticias -evitando atracones poco saludables- y
te llena de energía.
Así, a continuación te daremos una lista de deliciosos y
sanos smoothies para comenzar la mañana. Un desayuno rápido, pleno de sabor y
ultra saludable para empezar el día con el pie derecho.
Estos ingredientes están
llenos de proteína, un nutriente que brinda sensación de saciedad durante muchas
horas. Mezcla 1 banana mediana con 180 mililitros de leche, 2 cucharadas de
crema de maní y 1 cucharada de miel. Obtendrás una bebida de pocas calorías y
mucho sabor.
Se trata de un cereal que contiene fibra soluble, la cual hace más lenta la digestión permitiéndote cortar tu hambre hasta la hora del almuerzo.
Combina 1 taza de jugo de naranja con 3 cucharadas de avena sin cocer y 1 taza de yogur de vainilla (o en su defecto, 1 banana congelada). Agrega un toque de jarabe de arce light para darle dulzura al batido.
Las calabazas naranjas no contienen grasa, aportan pocas calorías y son ricas en fibra.
Combina ½ taza de calabaza enlatada o hecha puré con 1 taza de leche y unos cuantos cubitos de hielo. Agrega 2 cucharadas de azúcar morena o un edulcorante, más una pizca de canela y nuez moscada.
Una opción dulce, tentadora y deliciosa para desayunar.
Los batidos verdes representan un shock vitamínico para tu organismo. Además contienen mucha fibra y son naturalmente reducidos en calorías. Puedes hacer muchas combinaciones diferentes para obtener la dulzura que busca tu paladar. Por ejemplo, manzanas y peras o bananas y bayas con espinaca.
Veamos las proporciones: 3 partes de fruta fresca con 2 partes de vegetales de hojas verdes. Licúalos juntos en una máquina y si el batido está demasiado espeso, agrégale zumo natural de frutas frescas.