Las tres comidas convencionales del día: desayuno, almuerzo y cena, suelen ser la forma más común de alimentarse para la mayoría de las personas. Sin embargo, algunos expertos consideran que si lo que buscas es una Dietas Para Bajar De Peso, puedes obtener mejores resultados si tienes seis pequeñas comidas diarias, ya que de esta manera controlas la ansiedad, mantienes el hambre a raya y adelgazas, siempre y cuando elijas los alimentos adecuados y no excedas el tamaño de las porciones.

El hambre es el peor enemigo si lo que deseas es perder kilos. Esa sensación de vacío en el estómago por lo general ocurre entre comidas, cuando los niveles de azúcar en la sangre caen. En teoría, si se dividen las calorías necesarias en varias comidas pequeñas durante el día, el hambre no será un problema.

Para sentirte satisfecho, cada mini comida o merienda debe incluir proteínas magras o de bajo contenido de grasa, fibra, y un poco de grasa saludable. Para una alimentación completa, también debes incluir frutas y verduras. Junto con este plan de alimentación, incluye un multivitamínico para fortalecer el sistema inmunológico.

La carne magra, pescados, productos lácteos bajos en grasa, huevos, frijoles y soja son buenas fuentes de proteínas. Alimentos ricos en fibra incluyen granos enteros, como frutas, verduras y frijoles. Las grasas saludables provienen de aceites vegetales, aguacates, nueces y pescados.

Ciertamente, este tipo de dieta -basada en comidas pequeñas y frecuentes- puede acelerar tu metabolismo y quemar calorías. Aunque resulta sencillo realizar mini comidas, debes contar con el tiempo necesario para planificar cuidadosamente tus comidas y refrigerios, asegurándote de equilibrar los carbohidratos con proteínas, vegetales y frutas.

Comprueba tú misma la efectividad de las mini comidas con estas 18 opciones de menús que te presentamos a continuación:

Rellena un pan pita con el puré de medio aguacate, agrégale tomate fresco picado en tiras. 

Prepare una tortilla con 2 huevos, agregue un poco de espinaca o brócoli.

Esto le brindará a su cuerpo la proteína necesaria, hierro, calcio y otras vitaminas. Es un menú que incluye excelentes nutrientes para alimentar su cuerpo. 

Para obtener una gran cantidad de fibra y satisfacer el apetito, puedes preparar un plato vegetariano a media tarde. Te recomendamos el apio, las zanahorias, el brócoli, o el calabacín, pueden ser horneados o al vapor, como prefieras.

Si realizas un ejercicio físico moderado o alto, a media tarde puedes preparar un batido de fruta y agregarle 3 claras de huevo, con esto obtendrás la proteína necesaria para reconstruir la fibra muscular. Si no te agrado la combinación de huevos con fruta, puedes hacer el batido con suero de leche.

Para la cena, una comida ideal es una porción pequeña de quinoa o arroz integral, zanahoria y pollo a la plancha. Esta comida equilibra la fibra, proteínas y vitaminas

Para la última comida del día puedes comer yogur griego o descremado, acompañado por un tazón pequeño de frutas, como melón, durazno, fresas o piña. 

Consumir frutos secos dos o más veces a la semana puede ayudarte a reducir medidas. Aunque los frutos secos contienen calorías, ayudan a mantener la sensación de saciedad. Puedes comer maní, avellanas, nueces, almendras, pero no más de un puñado a la vez.

Las cotufas o palomitas de maíz son el snack por excelencia a la hora de ir al cine o ver películas en casa. No tienes que abstenerte de comerlas, sólo que no debes agregarles mantequilla y sólo una pizca de sal. La fibra contenida en los granos enteros puede ayudar a sentir satisfecho con menos calorías.

Al final de la tarde, el antojo por dulces puede ser fatal para las personas que realicen una dieta para aara . En este momento, nada mejor que comer un manzana, rica en fitoquímicos, antioxidantes y fibras que aceleran el metabolismo. Puedes cortarla en rodajas y espolvorear un poco de canela. 

Corta dos o tres cambures en rebanadas gruesas y colócalas en una bandeja. En un recipiente mezcla el yogurt con la vainilla y la mantequilla de maní. Mezcla hasta que tenga una consistencia cremosa. Coloca una cucharadita de la mezcla en cada una de las bananas y coloca encima otra rebanada para terminar. Mete al congelador por espacio de 1 o 2 horas. Este es un postre exquisito y bajo en calorías.

Mezcla dos cucharadas de atún con una cucharada de mayonesa light, puedes agregarle cebolla, tomates y pimentón picados, o zanahoria y remolacha.

Acompañe una porción pequeña de galletas, preferiblemente integral, con 1 onza de queso cheddar o bajo en graso  y 2 pepinillos, o 2 cucharaditas de mermelada. 

Deje remojar 1 taza de arvejas verdes en 3 tazas de agua durante 4 horas o más. Escurrir y deje secar. Coloce una sartén grande con aceite en fuego medio. Añada una porción de guisantes y cocine, revolviendo frecuentemente, entre 6 a 10 minutos, hasta que estén dorados y crujientes. Sazonar con una pizca de sal. 

Revuelva 1 cucharada de albahaca fresca picada, perejil y eneldo en 1/4 de taza de queso ricotta, bajo en grasa. Sazonar con sal, pimienta y jugo de limón. .

Cortar 3 tomates cherry y mezclar con 1 onza de queso feta desmenuzado o cualquiera bajo en grasa. Adereza con 1 cucharadita de vinagre balsámico y una cucharadita de aceite de oliva. Sazone con sal y pimienta al gusto. Puede espolvorear orégano fresco. 

Mezcle una porción de atún en agua con 3 cucharadas de frijoles blancos cocidos. Prepare un simple aderezo de 1 cucharadita de aceite de oliva, 1 pizca de sal gruesa, pimienta, y 1 cucharadita de jugo de limón.