Es importante tomar un multivitamínico al realizar esta dieta (se puede probar con Centrum). Además los suplementos probióticos pueden ayudar a reducir los síntomas.

Comer poco, a menudo y masticar cada bocado al menos unas 20 veces. “Las grandes porciones de comida aumentan la posibilidad de que los alimentos se fermenten en el intestino y que se produzcan flatulencias, cuyo exceso, es uno de los problemas que causa el dolor del síndrome de intestino irritable” dice la nutricionista Maria Griffiths.

Helen Foster, autora de 'Beat el hincha', publicado por Hamlyn ha revelado; “Corriendo al baño con un malestar estomacal no es divertido, y si también se sufre de una distensión severa después de comer, o dolores de abdomen, es muy probable que se tenga síndrome de intestino irritable (IBS).

“La causa exacta se desconoce, pero definitivamente se ve agravada por factores como; el estilo de vida, el estrés y la intolerancia alimentaria.

"Esta dieta anti-IBS excluye los alimentos más comunes como; los lácteos y el trigo, para que de esta manera el cuerpo se pueda recuperar, mientras que se determinan que alimentos empeoran los síntomas.

Si por alguna razón los síntomas empeoran, dejar la dieta y acudir de inmediato al médico.

• Día 1

Desayuno:

40g de Gachas de arroz o Quinua,  también copos de cebada con leche de soya, arroz con leche o agua. Además se pueden servir en la dieta con un puñado de frambuesas frescas.

Almuerzo

Media porción de sopa fresca. 2 a 3 tortas de arroz cubiertas con puré de aguacate.

Merienda

Un  pote de yogurt de soya y 2 barritas de cereal de sésamo.

Cena

Pollos fritos con un poco de salsa de soya, jengibre, pimientos verdes y champiñones. En esta dieta servir una porción de 50 a 75g de arroz basmati (grano largo)

• Día 2

Desayuno

2 o 3 tortas de arroz con almendra suave, mantequilla de maní y puré de plátano. Acompañar con un vaso de leche de avena, arroz o soja.

Almuerzo

Sándwich de rebanadas pan de centeno o pan de centeno sin trigo con salmón ahumado y manzana en rodajas.

Merienda

Un plato de cualquier baya (fruto carnoso) servida con yogur helado o avena de soya

Cena

Una tortilla de huevo, con patatas salteadas, espinaca y pimiento rojo acompañado de brócoli y un toque de pesto rojo.

• Día 3

Desayuno

Batido de proteína de leche de soya, arroz o avena con una bolsita de proteína de suero, mezclado con algunas fresas.

Almuerzo

Un Sándwich hecho con dos rebanadas de pan de centeno o también,  pan de centeno con rodajas de huevo cocido, espinaca y tomate en rodajas con mayonesa baja en grasa.

Merienda

De 2 a 3 pasteles de arroz cubiertos con mantequilla de nuez y puré de plátano.

Cena

Filete a la plancha de cualquier pescado blanco y puré de boniato (tubérculo de sabor dulce)

• Día 4

Desayuno

Copos de maíz o cereal con leche de soya, arroz o avena.

Almuerzo

Una ensalada al estilo griego; compuesta de lechuga, tomate, oliva y queso en fetas.

Merienda

Una tostada de centeno con mantequilla de nuez.

Cena

Pechuga de pollo a la parrilla con quinua y verduras asadas.

• Día 5

Desayuno

Yogur de soja con plátano picado y bayas.

Almuerzo

Ensalada de arroz y de vegetales servidos con conservas de atún o carne de cangrejo.

Merienda

2-3 tortas de arroz cubiertas con puré de aguacate.

Cena

Chuleta de cordero servido con puré de guisantes y pimientos rojos asados y calabacín.

• Día 6

Desayuno

Tostada de pan de centeno con huevos revueltos.

Almuerzo

Conservas de salmón o sardinas,  acompañadas con ensalada baja en grasa.

Merienda

2 broches de sésamo y una banana.

Cena

4 a 6 Vieiras fritas (moluscos bivalvos) con un poco de limón, se puede servir con espárragos y puré de boniato.

• Día 7

Desayuno

Papilla de arroz o Quinua con una pizca de canela y pasas de uvas.

Almuerzo

Media porción de sopa fresca servida con una rebanada de pan tostado de centeno y  ensalada de rúcula, tomate y remolacha

Merienda

Un plato de frutas servido con crema de yogurt o avena de soja 

Cena

Atún, salmón o trucha frita y rellena. Servir sobre un lecho de espinacas rociados por encima con passata (salsa de tomate concentrad), con 50g  de arroz basmati

• Consumir fibras
  Las fibras se presentan en dos variedades: fibra soluble (avena y legumbres) que mejoran la digestión y favorece la eliminación de los desechos orgánicos, ayudando de esta manera a las personas que sufren el IBS. La fibra insoluble (salvado y pan integral) que actúa como un irritante en las entrañas (órganos del cuerpo).
  
  

• Limitar la ingesta de frutas
  Muchos enfermos de IBS, han descubierto que tenían intolerancia a la fructosa, es decir el azúcar que contienen las frutas.
  
  

• Tomar Solgar caricol
  Se trata de una fruta que contiene puré de Papaya, que es conocido por brindar  una digestión más sana en las dietas.
  
  

• Hacer ejercicio diariamente
  Caminar ayuda a aliviar el estrés y estimula las contracciones de los  intestinos y evita el estreñimiento.
  
  

• Beber mucha agua en la dieta
  "Si una persona se encuentra deshidratada, el cuerpo absorbe el agua de las heces fecales, lo que provoca una difícil evacuación y puede agravar el dolor del IBS” dice la terapeuta nutricionista Elizabeth Harfleet.