Nuestra apretada agenda de todos los días muchas veces nos impide comer en familia ¡y menos tener tiempo para preparar un postre casero! 

Si necesitas alternativas saludables, ricas y fáciles de hacer para agregar un toque de dulzura a tu día después del almuerzo o la cena, checa estas propuestas. Veremos algunas recetas de la mano de expertos en gastronomía y nutrición.  

• Budín de vainilla con chía y arándanos: un postre de solo 162 calorías, libre de gluten y realmente delicioso, que además se prepara en minutos (eso sí, es recomendable dejarlo reposar un día entero en el refrigerador para que adquiera la textura adecuada) Las semillas de chía absorben los líquidos hasta formar la cremosidad típica de un budín. Aportan gran cantidad de fibra y ácidos grasos esenciales Omega 3.
  
  
  
• Frutos rojos con ricota y miel: una propuesta fresca con 192 calorías y plena de sabor. Utiliza frutos rojos de estación (cerezas, arándanos, frambuesas, frutillas, moras) mezclados, y agrega por encima un poco de ricota fresca endulzada con miel. Tendrás un postre repleto de antioxidantes y calcio.
  
  
  
• Ensalada de frutas y anacardos: nuez de la India (anacardos) con frutillas y dátiles forman una ensalada tentadora de 219 calorías, pero plena de nutrientes importantes. Los anacardos contienen grasas insaturadas, fósforos, cobre, hierro, magnesio; los dátiles son ricos en fibra alimentaria y las frutillas aportan vitamina C. Puedes reemplazar las fresas por otro fruto rojo de estación para obtener los mismos beneficios.
  
  
  
• Yogur griego con durazno y bayas: una propuesta de textura tentadora, excelente sabor y bajo aporte calórico (217 calorías por porción). El yogur griego contiene proteínas de alta calidad; las frutas seleccionadas aportan fibras y fitonutrientes importantes para el organismo. Congelando el postre en el refrigerador y añadiendo mango, cereza o piña podrás crear recetas únicas. Esta, particularmente, fue pensada para pacientes con deficiencias renales.
  
  
  
• Helado con café y licor: por solo 278 calorías podrás darte el gusto de probar un postre italiano clásico. Se prepara fácilmente, colocando una bocha de helado (preferentemente de vainilla) en una copa, un chorrito de café expreso y otro de licor.