Además de la dieta que solemos llevar
a cabo y los ejercicios diarios, es imprescindible que prestemos
atención a todos aquéllos consejos que nos hablan de cómo afrontar
y vencer los malos hábitos alimenticios que nos impiden llevar a
cabo con eficacia nuestro programa de pérdida de peso.
Con una serie de consejos que le vamos
a detallar a continuación podrá superar esos momentos especialmente
difíciles en los cuales nos resulta tremendamente complicado vencer
esos malos hábitos, perjudicándonos en nuestra pérdida de peso,
con lo que lograremos al fin, llevar un estilo de vida normal y
saludable.
Y es que todas las épocas del año son
importantes cuando se trata de tener un cuerpo de aspecto y salud
envidiables, pero cuando llega el verano, esto se convierte en un
factor tal vez determinante y controlar nuestros malos hábitos
alimenticios puede convertirse en algo estresante
Echemos un vistazo a lo que da lugar a
estos malos hábitos alimenticios:
Una de las causas más comunes por las
que muchas personas suelen acudir al frigorífico o a la despensa a
servirse una porción de lo que pille dentro, no es el hambre, sino
el estrés o los nervios. Este es uno de los ejemplo más llamativos
y constantes de mal hábito alimenticio, y si queremos perder peso o
mantenernos en el que tanto trabajo nos ha costado lograr, debe cesar
inmediatamente.
Así que si siente la imperiosa llamada de un
paquete de patatas fritas, o de unas galletas o cualquier otro
alimento, pero realmente no tiene hambre, mejor váyase al cine o
haga cualquier cosa que le distraiga, pero no coma, ya que esto sólo
acentuará los posibles problemas que le hagan sentir esa necesidad
al sumarse otro que le estresará doblemente: el aumento de grasa
corporal y de peso.
De lo que se deduce que la solución a
largo plazo está en resolver sus problemas de estrés y no
refugiarse en sus “queridos alimentos basura”.
Este es otro ejemplo de mal hábito
alimenticio: estamos tratando de perder peso rápidamente, por lo que
evitamos a toda costa comer durante el día, y más o menos lo
controlamos, pero llega la cena y de repente no nos contenemos más y
nos damos el atracón de comida, que además, suele ser comida
basura, pensando que como son chucherías no engordarán tanto como
un buen plato de comida.
Así pues, el consejo es que dejen de
reprimir el comer durante el día, y hagan pequeñas comidas
regulares, que pueden ser tan sencillas y eficaces a la hora de
paliar nuestra hambre como una pieza de fruta.
No nos damos cuenta, pero lo cierto es
que nuestro subconsciente influye muchísimo en la forma en que nos
vemos; además, a ello contribuye también la forma en que nos
sentimos, la opinión que tenemos de nosotros mismos. Son factores
determinantes sobre la dirección de nuestras metas y el éxito de
nuestras dietas.
Es decir, si pensamos que tenemos un cuerpo feo que
no puede corregirse, que no puede perder peso, trataremos de
sentirnos bien por compensación, a base de comer comida chatarra que
nos reduce temporalmente la sensación de estrés (a ello contribuye
el alto contenido en azúcares).
Por eso, nuestro consejo es que
trate de tener paciencia consigo mismo y sobre todo tenga paciencia
sobre los resultados de su dieta. Y más importante aún: deje de ser
tan negativo con respecto a usted mismo.
Es un consejo fundamental, ya que es
uno de los peores hábitos a la hora de tratar de perder peso: comer
muy tarde o incluso por la noche. Y es que no solamente esto de por
sí es perjudicial, como veremos, sino que, además, el tipo de
alimentos más frecuentes en esta franja horaria suelen ser dulces,
pan, patatas fritas o alimentos pesados, todos los cuales tienen gran
cantidad de calorías.
Pero como decíamos, lo peor no es eso,
sino que al ser ya tarde, el cuerpo no tiene posibilidad de consumir
esas calorías, y con seguridad, las almacenará. Así pues, evite a
toda costa comer demasiado tarde. Sin embargo, si su horario laboral
es complicado o tiene un estómago sensible y tiene que comer algo,
evite por todos los medios comer comidas pesadas y elija comidas
ligeras como ensañadas, verduras o tal vez incluso pequeñas
porciones de pollo o pescado, asadas en parrilla, que así serán más
ligeros y saludables.
Con estos consejos, indudablemente
usted logrará mantener a raya su tendencia a engordar y su dieta
tendrá, finalmente, resultados positivos.