Hay momentos en la vida que por alguna razón u otra no podemos dejar de comer y se nos complica bajar de peso.

Cuando comemos en exceso, a menos de que hagamos mucho ejercicio, definitivamente las calorías extras se acumulan en nuestro cuerpo y aumentamos de peso.

Pueden existir muchas razones por las que comemos de más, tanto físicas, como emocionales.

En este artículo te contaremos cuáles son esas posibles razones y que podemos hacer para evitarlo.

Cuando comemos porque estamos estresados, es porque vemos la comida como una forma de alivio ante las situaciones que estamos viviendo.

Cuando comemos nuestra comida favorita, disminuimos el estrés temporalmente. El problema es que no nos ayuda a bajar de peso y de hecho aumentamos de peso. 

El hecho de aumentar de peso nos hace sentirnos más estresados y comemos más. Es un círculo vicioso que se vuelve en un hábito muy difícil de deshacer.

A todos nos ha pasado que aumentamos un par de kilitos (o más!) en épocas de fiestas y celebraciones. Por ejemplo, en épocas navideñas, es casi un decreto que subiremos de peso. No solamente se come de más, sino que los postres abundan, además de recibir regalos como chocolates, pasteles, galletas y cosas por el estilo, haciendo que sea una época difícil para cuidar nuestra alimentación y peso.

Si estás estresado, intenta hacer algo diferente de comer en ese momento. Una buena idea es tomar un té calmante, por ejemplo, té de rooibos o té verde. Si te tomas dos o tres tres tazas, te va ayudar a calmar la ansiedad ademas de se te va a quitar el hambre y los antojos también. Y como son tés naturales no tienes de que preocuparte.

Otra idea es tirar a la basura toda la comida chatarra que tienes a la mano y reemplazarla por frutas. Especialmente frutas dulces como las bananas, para calmar nuestra ansiedad por algo dulce, con un alimento más sano.

Una tercera idea es moverte, salir a caminar y distraerte cuando sientes que estás a punto de estallar.

Estas ideas te pueden ayudar no solamente a manejar la ansiedad sino a bajar de peso también.

Lo primero que debes hacer es pensar que es lo que te está haciendo comer mucho y atacar directamente el problema. Muchas veces, no está de más una ayuda profesional.