Muchos estudios nutricionales han comprobado que un alto consumo de hidratos de carbono causa aumento de peso. Cada vez que comemos alimentos ricos en este nutriente, nuestro organismo libera insulina, sustancia que a su vez aumenta nuestro deseo de seguir comiendo. Es decir, que se genera un círculo vicioso por el que cada vez engordamos más. Para evitarlo, tenemos que seguir una dieta baja en carbohidratos.

¿Cuáles son los alimentos permitidos y prohibidos en un régimen con pocos hidratos? Podemos comer carnes sin grasa, huevos, queso, tofú (queso a base de soja), todo tipo de verduras, frutas secas (por ejemplo, nueces) y legumbres. En cambio, deberemos evitar el pan, el arroz y las pastas que no sean integrales, el excesivo consumo de frutas, los panificados muy elaborados, las golosinas, el azúcar y el alcohol.

Es verdad que existen muchos tipos de dietas diferentes, pero dos de las más conocidas proponen reducir la cantidad de hidratos de carbono que ingerimos día a día. Se trata de la dieta South Beach y de la dieta Atkins. Son famosas porque han ayudado a miles de personas alrededor del mundo a bajar esos molestos kilos de más y lograr un aspecto saludable.

Ambas presentan un sistema de fases, un “paso a paso” que primero busca reducir el peso corporal, a continuación acostumbrar el cuerpo a una nueva forma de alimentación constante y finalmente, estabilizarlo para que los resultados sean duraderos en el tiempo. De todos modos, siempre debemos tener presente que reduciremos los kilos más rápido si combinamos el plan con un poco de actividad física todos los días.

Este régimen contempla 3 etapas; la última es la más importante, porque apunta a mantener el peso ideal y no volver a ganar los kilos perdidos. Es decir que no tendremos el tan temido “efecto rebote”, que hace que muchas personas se desilusionen con las dietas.

La dieta baja en carbohidratos South Beach distingue entre hidratos de carbono buenos y malos, como así también, entre grasas buenas y malas. No prohíbe el consumo de este tipo de nutrientes, sino que distingue cuáles son beneficiosos para el organismo y cuáles no, permitiendo la ingesta de los “buenos”.

•  Primera etapa: en los comienzos de la dieta, deberemos hacer cinco ingestas diarias: tres comidas fuertes y dos colaciones. En este momento solo podremos optar por alimentos muy bajos en hidratos de carbono. ¿Un consejo? Es recomendable imprimir una tabla donde estén detallados los alimentos y sus nutrientes, para no elegir equivocadamente.

• Segunda etapa: ahora veremos que se amplía el abanico de opciones. Comenzaremos a incluir en nuestra alimentación algunas frutas, como así también harinas integrales.

• Tercera etapa: en este momento habremos alcanzado nuestro peso ideal. Deberemos diseñar nuestro propio plan de comidas, basándonos en lo que hemos aprendido en las dos fases anteriores. Ya sabemos qué alimentos son saludables y cuáles solamente nos harán engordar.

En conclusión, ya hemos visto que una dieta baja en carbohidratos es ideal para perder kilos sin descuidar nuestra alimentación. No se trata de prohibir alimentos o nutrientes, sino de elegir los que sean de calidad para el organismo. Aconsejamos seguir la dieta South Beach y hacer gimnasia para tener un cuerpo sano y atractivo.