• 150 gr. de yogur ligero (opcional) natural o de sabor
• 1 litro de leche
• 20 gr. de azúcar
• 100 gr. de frutos secos variados
• 2 cucharadas de copos de avena
  

En un cazo ponemos a calentar la leche hasta el momento justo antes de hervir, debemos mantener esta situación durante 5 minutos.

Volcamos la leche en un recipiente con tapa, añadimos el yogur y el azúcar. Removemos suavemente hasta mezclarlo todo conjunto.

Tapamos la mezcla y la dejamos a temperatura ambiente durante unos 10 minutos, removiendo de vez en cuanto. Transcurrido este periodo la leche habrá fermentado habiendo obtenido un yogur casero.

Cuando el yogur esté cuajado lo introducimos en el frigorífico para poder consumirlo.

Antes de servir el yogur agregamos unos trocitos de frutos secos tostados junto con los copos de avena.