El aspartamo está presente básicamente en el café, té, mate cocido, en los jugos y en las gaseosas dietéticas, pero muchas personas no están de acuerdo con consumir productos creados artificialmente, ya que piensan que lo natural es mucho más saludable.
Pues bien, el aspartamo fue descubierto por casualidad por un químico, llamado James Schlatter, en el año 1965. Este edulcorante contiene dos aminoácidos, llamados fenilalanina y ácido aspártico. Luego de un arduo día de trabajo en su laboratorio, James se lamió el dedo y descubrió el gusto dulce de la mezcla con la que había estado trabajando.
Una vez ingerido, el aspartamo es atacado por el ácido estomacal, que lo divide nuevamente y lo convierte en los dos aminoácidos anteriormente mencionados. Una vez que esto sucede, se produce también otro producto, el metanol. Este último continúa su rumbo siendo dividido nuevamente y produciendo formaldehído. Este producto es el que produce miedo en las personas debido a que es cancerígeno y venenoso para el cuerpo.
Pues bien, la realidad es que estas sustancias ya están presentes en el cuerpo, pero en dosis pequeñas. Los jugos y la manzana por ejemplo, tienen dosis más altas de formaldehído que el aspartamo.
Por lo tanto, en el año 1996 fue aceptado en Estados Unidos el uso de esta sustancia como edulcorante, y en 1994 fue aceptado en Europa.
Una vez aceptado, esta sustancia se propagó por la mayoría de los países subdesarrollados también. En todas las cocinas apareció este producto innovador que traía la posibilidad de tomar sus bebidas favoritas con un edulcorante dietético que no le aportaba calorías a su alimentación diaria.
Hay ciertas personas que presentan un tipo disfuncional de enzima en su metabolismo. Estas personas tienen la llamada enfermedad genética fenilcetonuria.
Esta enfermedad dificulta la capacidad de metabolizar y de digerir algunos alimentos. Por lo tanto, no podrán ingerir lácteos, carne, pollo, huevo, pan, pasta y tampoco aspartamo.
Pero para aquellos que no sufren de esta enfermedad, tengan en cuenta que el aspartamo le permite disminuir la cantidad de calorías que consumen por día, generando
el tan deseado adelgazamiento.
Como bajar de peso es un interrogante que puede resolverse consumiendo aspartamo como edulcorante artificial en vez de azúcar.
Consulte igualmente a su médico siempre que vaya a probar por primera vez cualquier sustancia como esta.
Es preferible estar al tanto de su salud que luego lamentar las consecuencias.
Se presentaron 163 personas obesas a realizar una investigación que partía de la premisa de que el aspartamo permitía bajar de peso y además mantenerlo. Una revista americana sobre nutrición presentó los resultados.
El programa se basaba en elegir aleatoriamente de entre todas estas personas aquellas que durante cuatro meses estarían consumiendo este edulcorante y aquellas que no lo harían. Luego se evaluaba durante un año el mantenimiento de este peso y se realizaba una especie de guardia durante dos años más. Pues bien, se probó que durante el programa, las personas que usaron el edulcorante, lograron bajar de peso y además aquellos que consumieron el aspartamo y luego se veía si mantenían su peso, pues sí, lo mantenían. En comparación, los que ingerían aspartamo bajaron más de peso que los otros que no lo hicieron.
Por lo tanto las conclusiones sugieren que esta sustancia ayuda a bajar de peso y también a mantener los resultados.
Recuerde que además de utilizar este edulcorante, deberá, para bajar de peso, seguir una dieta que le permita reducir la cantidad de calorías que consume por día.
También acceda a un programa de ejercicios por semana y logrará resultados increíbles en menor tiempo.
Como bajar de peso es una inquietud resuelta con el aspartamo.
Mas allá de consumir espartamo y reducir las dosis de azúcar en sus bebidas, le recomendamos que tenga en cuenta llevar a cabo ciertos programas de ejercicios dependiendo de lo que a usted le guste.
Ir a gimnasios o contratar a un especialista, como por ejemplo un entrenador personal, le permitirán acceder a un plan de ejercicios que lo ayudará a bajar de peso.
Muchas empresas de cable le permiten acceder a ejercicios a través de su televisor, sin tener que moverse de su hogar.
Programas como musculación, yoga, pilates y ritmos son ofrecidos a traves de esta opción.
Andar en bicicleta, salir a caminar o correr, también son otras formas de ejercitarse sin tener que gastar dinero. Recuerde hacerlo con frecuencia y establecer determinadas horas por semana para hacer su entrenamiento.
Prepárese una tabla con sus horarios disponibles y póngase en forma.
No solo bajará de peso sino que además, mejorará su salud.