Les voy a hablar pues, de cómo dejar de comer tanto. Desgraciadamente sé bastante acerca del problema, y conozco también cómo dejar de comer tanto por razones emocionales. Son cuestiones bien conocidas por mí.

Y es que al principio, no fui consciente de lo que estaba haciendo con mi peso, y simplemente me limitaba a comprar camisas o pantalones de tallas cada vez superiores. Todo el mundo me decía que estaba ganando peso, pero yo no me lo creía.

Y ahí está la raíz del problema, porque ¿cómo vas a dejar de comer tanto si no te das cuenta del problema? ¡No puedes!

Pero un buen día me invitaron a una fiesta y allí me hice varias fotografías. El momento del descubrimiento, de la verdad, llegó cuando vi las fotos: ¡esa no podía ser yo!: mi cara, mi cuerpo y especialmente mi ropa, eran mucho más voluminosas, para poder cubrir toda mi grasa corporal.

Por eso, con el fin de iniciar un cambio, tienes que empezar por ver cómo eres y darte cuenta del aumento de tu peso, y sobre todo, de que la causa de tu aumento de ingesta tiene un origen emocional.

Así que, como veis, es más fácil contestar a la pregunta de cómo dejar de comer tanto cuando nos damos cuenta de que tenemos un problema. Una vez realizado el primer paso, continué trabajando sobre mis emociones, haciendo comidas saludables, y empecé a hacer ejercicio.

Así pues, una vez que me di cuenta de que mi vida no era tan mala y de que los cambios que se habían producido al principio de toda esta historia no eran tan malos, controlé firmemente mi forma de comer, dejando de lado absolutamente los dulces, comiendo cosas saludables, y dejando totalmente la comida chatarra y las ricas en grasas, comidas todas que hacía motivadas únicamente por el estrés.

Evidentemente el cambio no fue nada fácil: antes me comía dos barras de chocolate por las noches, y ahora sólo una manzana. La verdad, siempre me parecía insuficiente.

Y lo cierto es que tuve que esforzarme mucho, sin embargo, no puedo negar que a veces tuve que recurrir a métodos externos para reducir mi hambre, ya que a veces parece que no vas a poder lograr recuperar tu estado anterior.

Recuerdo perfectamente el momento en que pude volver a ponerme unos vaqueros de los de antes del cambio. Eso vaqueros, hacía unos meses no me llegaban sino hasta las rodillas, y ahora me encajaban perfectamente. Fue un momento de sublime alegría, apenas podía creer que podía volver a usar la ropa que tenía antes de ese período horrible.

Así que, basada en mi experiencia, les voy a dejar unos cuantos consejos útiles para dejar de comer tanto:

Lo primero que debes hacer es ser sincero/a contigo mismo/a y asumir que tienes un problema.

Identifica el problema para poder empezar a resolverlo.

Una vez logrado, comienza por comer a horas regulares y sólo toma pequeños refrigerios saludables entre ellas, si es imprescindible.

Deja de comer comida chatarra y elimina o reduce drásticamente los dulces.

Has de tener mucha paciencia, los cambios no son inmediatos, y mucha tenacidad y voluntad.