¿Te imaginaste alguna vez que la grasa te ayude a bajar de peso?

Pues sí, el aceite de coco es la grasa que más te puede ayudar a lograr tu peso ideal.

Simplemente porque contiene una combinación única de ácidos grasos que aporta un poderoso efecto en tu metabolismo.

Según el resultado de varios estudios el aceite de coco no solo te ayuda a adelgazar sino que se encarga de eliminar la grasa peligrosa, esa que se encuentra en la zona abdominal.

Otra característica fundamental del aceite de coco que está relacionado con bajar de peso es que reduce el apetito.

No sentir hambre es fundamental cuando se quiere perder peso sin esfuerzos.

Aunque es cierto que tenemos que quemar más calorías que las que ingresa en nuestro organismo. No es necesario estar pendiente de ellas para bajar de peso.

La naturaleza de los seres humanos es ser delgados y saludables. Según varios estudios la obesidad se inició a fines del siglo 20.

Así que durante 20 siglos el hombre sobrevivió saludablemente sin tener idea de cuántas calorías consumía pero sí estamos seguros de que comían saludablemente y solo la cantidad que necesitaban.

El hecho de que comer menos indudablemente nos hará ingerir menos calorías. Así que si encontramos un alimento que reduzca el apetito, como el aceite de coco, será de gran ayuda para bajar de peso sin sacrificios.

Los ácidos grasos de cadena media tienen la propiedad de brindar más saciedad que cualquiera de las demás grasas, dando lugar automáticamente a una ingesta mucho menor de calorías en el día.

¿Cómo ocurre este proceso?

La clave se encuentra en la manera con que las grasas se metabolizan.

Los cuerpos cetónicos tienen el poder de reducir el apetito y el aceite de coco provoca que el hígado produzca estos cuerpos.

Entonces hasta ahora el aceite de coco tiene dos grandes propiedades que tienen un efecto muy positivo en nosotros si queremos bajar de peso.

Por un lado aumentar la quema de grasa y por otro reduce nuestro apetito. Pero tiene otra propiedad más que lo convierte en una grasa estrella.

Aunque te parezca ilógico, una caloría que ingresa a tu cuerpo no siempre es una caloría más en tu organismo.

Sucede que las diferentes composiciones de los alimentos tienen efectos diferentes en el metabolismo y en las funciones generales de nuestro cuerpo.

Algunos alimentos, por ejemplo, necesitan o consumen más energía en el momento de digerirlos y metabolizarlos.

Pero en el caso del aceite de coco, se suma la propiedad de ser un alimento termogénico. Lo que significa que tiende a quemar más grasas en comparación a otras grasas que tienen la misma cantidad de calorías.

Con el solo hecho de sustituir el aceite normal que utilizas en tu dieta para bajar de peso diariamente por el aceite de coco lograrás una gran diferencia.

De aquí que una caloría de aceite de coco no es lo mismo que una caloría de aceite de oliva o mantequilla. Aunque este tipo de grasas también son saludables.

La clave se encuentra en su composición. El aceite de coco es rico en triglicéridos de cadena media, estos ácidos grasos aceleran el metabolismo.

Esa es la diferencia fundamental que existe entre el aceite de coco y la mayoría de otras grasas que poseen ácidos grasos de cadena larga.

El hecho de que sean de cadena media y no de cadena larga implica que estos ácidos grasos se metabolizan de manera diferente.

Puesto que llegan directamente al hígado donde se sintetizan en energía o en cuerpos cetónicos.

El aceite de coco es especialmente indicado a los pacientes epilépticos que siguen una dieta cetogénica, para aumentar los niveles de cetona y permitir la ingesta de carbohidratos en la dieta.

Es importante tener en cuenta que el aceite de coco es grasa. Y como tal tiene 9 calorías por gramo!

Por lo tanto, si estás siguiendo una dieta que sea estricta en consumir una determinada cantidad fija de calorías por día, puede suceder que subas de peso si agregas el aceite de coco.

A la vez, si agregas aceite de coco a tu dieta sentirás más saciedad y es muy probable que comas menos calorías, porque ingieras menos alimentos.

Así que no se trata de agregar el aceite de coco a tu dieta sino de sustituirlo por otros alimentos de tu dieta que sean ricos en grasa como el aceite que utilizas para cocinar.

Tampoco es cuestión de que agregues grandes cantidades de aceite de coco para obtener mayores beneficios. No olvides que sigue siendo grasa.

Todos los estudios de los que se habla en este artículo fueron obtenidos a base de 2 cucharadas de aceite de coco por día.

Además para tener todos los nutrientes debes tener en cuenta agregar como alimentos principales de tu dieta aquellos del reino vegetal y animal que son completos para tu salud.

La pregunta fundamental es que si el aceite de coco produce un aumento del metabolismo y reduce el apetito, ¿también nos ayuda a perder grasa a largo plazo?

Definitivamente sí, y hay muchos estudios que así lo comprueban.

¡El aceite de coco reduce la cintura!

Si lo comparamos con el aceite de soja, este último hasta provoca un leve aumento del vientre.

La explicación más sencilla es que el aceite de coco provoca un leve aumento del colesterol bueno (HDL) , mientras que el aceite de soja reduce el nivel del colesterol bueno HDL y aumenta el nivel del colesterol malo (LDL).

Aunque según los resultados de varios estudios el aceite de coco no causa pérdida de peso global en comparación con el aceite de soja, si ayuda a reducir significativamente la grasa del vientre, tanto en hombres como en mujeres.

Pero la importancia de que sea la grasa abdominal la que se reduzca aporta muchos beneficios a nuestra salud en general.

La grasa abdominal es muy peligrosa para nuestra salud ya que causa inflamación, diabetes y mayor riesgo de contraer enfermedades del corazón.

Por lo tanto si conseguimos bajar poco peso en general pero varios centímetros de cintura estaremos consiguiendo salud.

Por estas razones el aceite de coco está tomando importancia como estrategia para perder peso y se puede sumar a cualquiera de las estrategias probadas como la reducción de carbohidratos o aumento de proteínas.