Es común escuchar avisos de salud y nutrición previniéndonos sobre los daños colaterales que provocan todo tipo de alimentos. El chocolate, en ese sentido, ha sido uno de los más criticados por su contenido de grasas saturadas; sin embargo, se trata de un alimento que aporta muchos beneficios a tu organismo si lo consumes de manera moderada.

Diversas investigaciones médicas sugieren que, incorporado a la dieta regularmente y siempre que sea de buena calidad –chocolate con una proporción de por lo menos 70% de cacao natural- es muy beneficioso para el corazón.

Está comprobado que el chocolate eleva el colesterol bueno y disminuye el malo. En efecto, si este producto presenta alto porcentaje de cacao (85%) aumenta los niveles de HDL en sangre y al mismo tiempo reduce la presencia de LDL. La razón es su composición de ácidos oleicos saludables, que son beneficiosos para el corazón.

Por otra parte, el chocolate disminuye el riesgo de ataques cardíacos. Un grupo de investigadores del Hospital de Mujeres de Brigham analizó a casi 5000 personas de un amplio rango de edades, y comprobó que aquellas que consumieron más chocolate tenían menor incidencia de anomalías del corazón. No solo porque la manteca del cacao equilibra el colesterol, sino también porque baja la inflamación crónica que produce arterioesclerosis.

El estudio constató que mientras mayor era la frecuencia de ingesta, más protección cardíaca presentaban los pacientes. El índice más alto de reducción de los ataques de corazón se produjo en los individuos que comieron chocolate 5 o más veces a la semana. En cambio, los que consumieron otro dulce equivalente sin chocolate tenían 49% más posibilidades de sufrir un accidente cardiovascular.